La maternidad subrogada puede ser un viaje gratificante pero costoso para muchos futuros padres. Una pregunta frecuente es si los gastos asociados a la maternidad subrogada son deducibles fiscalmente. Este artículo explora las complejidades de los gastos de maternidad subrogada en el contexto de la legislación fiscal estadounidense.
Costes de la maternidad subrogada
Gastos médicos: Tratamientos de FIV, cuidados prenatales y gastos de parto.
Gastos legales: Contratos entre los futuros padres y la madre de alquiler, documentación sobre la patria potestad.
Honorarios de las agencias: Honorarios pagados a las agencias de gestación subrogada por servicios de emparejamiento y apoyo.
Compensación a la madre de alquiler: Pago que se hace a la madre de alquiler por su tiempo y esfuerzo.
Normas del IRS sobre gastos médicos
Según Hacienda, los gastos médicos son deducibles si se pagan para el diagnóstico, curación, mitigación, tratamiento o prevención de enfermedades, o para tratamientos que afecten a cualquier parte o función del cuerpo. Esto puede incluir tratamientos de fertilidad como la fecundación in vitro (FIV).
Sin embargo, el IRS no proporciona orientaciones explícitas sobre si los gastos de maternidad subrogada, incluidos los pagos a una madre de alquiler, pueden considerarse gastos médicos deducibles.
Puntos clave a tener en cuenta
- Deducciones médicas por FIV: Si tú, como futuro padre, te sometes a tratamientos de FIV, esos costes pueden considerarse gastos médicos deducibles. Esto incluye los costes relacionados con la extracción de óvulos, el trabajo de laboratorio y la transferencia de embriones.
- Gastos legales y de gestoría: Estos honorarios no suelen ser deducibles, ya que no están directamente relacionados con la asistencia médica.
- Gastos relacionados con el sustituto: Los pagos efectuados directamente a una madre de alquiler o los gastos que se le reembolsan no suelen considerarse gastos médicos deducibles por el IRS. Esto incluye sus gastos médicos, indemnización y costes relacionados.
Deducciones y estrategias personales
Aunque la mayoría de los gastos de gestación subrogada no son deducibles, hay algunas estrategias que los futuros padres pueden tener en cuenta:
- Cuenta de Ahorros Sanitarios (HSA) o Cuenta de Gastos Flexibles (FSA): Algunos gastos médicos relacionados con tus propios tratamientos de fertilidad podrían pagarse con dinero antes de impuestos a través de estas cuentas.
- Deducciones detalladas: Si detallas tus deducciones, puedes incluir los gastos médicos que superen el 7,5% de tus ingresos brutos ajustados (AGI). Esto se aplicaría principalmente a tus propios gastos médicos.
Consulta con un profesional fiscal
Las implicaciones fiscales de la maternidad subrogada son complejas y están evolucionando. Es fundamental que consultes con un profesional fiscal que tenga experiencia en casos de maternidad subrogada para comprender cómo se aplican las normas a tu situación concreta. Pueden proporcionarte asesoramiento personalizado y ayudarte a navegar por las leyes fiscales para maximizar las posibles deducciones.
Reflexiones finales
Aunque los gastos de maternidad subrogada son en gran medida no deducibles, determinados gastos médicos relacionados con los tratamientos de fertilidad para los futuros padres pueden ser deducibles. Comprender los detalles de las normas del IRS y consultar con un asesor fiscal experto puede ayudarte a gestionar los aspectos financieros de tu viaje de gestación subrogada con mayor eficacia.
Si tienes más preguntas o necesitas ayuda, no dudes en ponerte en contacto con un profesional especializado en este ámbito. La maternidad subrogada es una inversión emocional y económica importante, y comprender las implicaciones fiscales puede ayudarte a tomar decisiones informadas a lo largo del proceso.